Patricia & Jesús [Boda en Alcalá de Henares]

Cuando una pareja ve esa afinidad con nosotros como personas, ven que nuestro estilo de fotografía es justo lo que desean para su boda, y se ilusionan junto con nosotros con el proyecto, ya solo queda ponerse manos a la obra, desde el momento que nos reservan, meses antes de la boda, aprovechamos para irnos conociendo mejor, intercambiaremos muchos emails y muchas conversaciones de teléfono, las que hagan falta, Laura y yo no contamos el tiempo que dedicamos a cada pareja, ni los minutos que hablamos por teléfono o por mail, y son horas y horas detrás de todo el resultado, hay muchísimo trabajo, pero disfrutamos enormemente con ello, con que cada pareja tenga su sueño hecho realidad, dándoles lo mejor, el mejor servicio, los mejores equipos, cámaras, objetivos, ordenadores y monitores, para que tengan las mejores fotografías, no sería posible hacerlo por obligación. Esta calidad y este grado de implicación es lo que determina los costes y el precio del reportaje, junto con la demanda de cada temporada porque toda las bodas se concentran en unos pocos viernes y sábados al año.
Sé que hay fotógrafos que se dedican también a otras actividades a la vez, que tienen otros trabajos, la dedicación no es la misma, el grado de implicación no es el mismo, y el resultado tampoco. Nosotros nos dedicamos en exclusiva a la fotografía de bodas, a tiempo completo todo el año, nos dimos cuenta de que si haces otra actividad no puedes dedicarte al 100% a atender bien este negocio.
Cuando una pareja nos contrata sabe que nosotros nos dedicaremos plenamente a ellos, dedicándoles el tiempo que haga falta, y que sus fotos las procesaremos una a una con mucho cuidado y sin prisas, el tiempo que necesite cada reportaje.
Nos gusta tener muy buena comunicación con cada pareja, conocer cada detalle de su boda y de su personalidad para aconsejarles y ayudarles a que todo sea su sueño y cada pareja sueña diferente.
El día de la boda todo será el resultado de lo que se ha organizado, de la buena comunicación, de la calidad de los materiales y de la atención puesta, cada foto reflejará la personalidad y la atmósfera de ese momento y quedarán toda la vida para vosotros.
Una foto se hace en un clic que dura un instante, pero el 90% del tiempo estás relacionándote con personas, y con tu actitud puedes motivar pero también desmotivar, acercar pero también alejar, eso es lo más bonito y difícil de este trabajo, si te fijas bien lo puedes descubrir al ver una fotografía, pero hay que fijarse muy bien, probablemente solo te des cuenta de que una fotografía te ha encantado o que no te dice mucho, pero no sabes explicarlo con palabras, eso es el fotógrafo y no la máquina, si os fijáis en nuestras fotografías casi se pueden tocar los sentimientos, las emociones, el momento es verdadero, las personas son ellas mismas y las fotografías capturan la magia que cada persona desprende.
Capturar esto es la belleza de nuestro trabajo.
Conseguir que se sientan confiados y relajados en nuestra presencia, que sean ellos mismos, y el fotógrafo en toda caso les motivará a que en ese instante suceda algo especial.
Nuestra fórmula tiene siempre un estilo propio que adaptamos a todas nuestras parejas, más de 12 horas de cobertura continuada para dar atención a cada detalle cada minuto del día, no se escapará ningún momento, dar el mejor servicio humano y consejos para ese día a cada pareja desde que reservan con nosotros, no ser intromisivos pero crear un clima que alimente la ilusión, la simpatía y la confianza.
Como siempre explico nuestros posados no están preparados, no lo penséis, surgieron naturalmente de la pareja y de la química con nosotros en ese momento.En este post me he extendido un poquito pero me gusta compartir nuestras ideas abiertamente y lo que hay detrás del resultado de cada trabajo que muchas veces no se ve.
Felicidades Patricia y Jesús!, Laura y yo os deseamos todo lo mejor, y no olvidaremos el bonito día que pasamos con vosotros.
David.